Especialistas de la UPAEP afirman que no hay una medida o política pública que pueda contrarrestar el incremento de obesidad y sobrepeso en el país.
Por: Ricardo Carmona / www.muraleducativo.com
Los malos hábitos alimenticios de los mexicanos se hicieron evidentes durante el confinamiento provocado por la pandemia de COVID-19 y en algunos casos se incrementaron, debido a la falta de conciencia personal, en cuanto a una alimentación correcta, consideró la directora de la facultad de nutrición de la UPAEP, Lourdes Silva Fernández.
En conferencia de prensa virtual, la especialista en nutrición destacó por ello nuestros malos hábitos alimenticios se hicieron evidentes durante la pandemia, pues -dijo- la inercia de mala nutrición es difícil de modificar en un ambiente de confinamiento social.
Asimismo, consideró que no hay una política de orientación y bienestar nutricional que permita disminuir los índices de obesidad y sobrepeso de los mexicanos, ya que de lo que se trata es de que de manera personal se adquiera conciencia de la importancia de una buena alimentación.
En ese sentido, señaló que la efectividad de iniciativas de leyes que buscan gravar con impuestos extra los alimentos con altos contenidos calóricos y procesados, no son viables si no hay una concientización de la importancia del bienestar alimentario.
Dijo que es necesario realizar una planeación alimentaria a la semana, como mínimo, pues permite prospectar la cantidad de alimentos por grupo que se van a ingerir, para que nuestros hábitos de ingesta sean lo más balanceados posible.
En su oportunidad, Celia Francisca Arenas, docente de la misma facultad de la UPAEP recalcó la poca efectividad que tiene en la salud el ponerse a dieta, ya que no se trata de dejar de comer, sino más bien de ser conscientes de lo que se ingiere, sus porciones y propiedades nutricionales y caloríficas.