La pedagogía del bien común se fundamenta en cuatro pilares de aprendizaje clave: aprender a vivir, convivir, transformar y trascender
Por: A. Miguel / www.muraleducativo.com
“Las matemáticas son un área crítica en la educación de todas las personas”, por ello, es necesario desarrollar el pensamiento matemático y abstracto para mejorar habilidades de comunicación, organización y toma de decisiones, enfatizó Damián Emilio Gibaja Romero, Director del Área de Matemáticas del Decanato de Ingenierías de la UPAEP.
Gibaja Romero señaló datos preocupantes provenientes de organismos internacionales, como la prueba PISA, que revelan un rezago significativo en la educación matemática en México. Se estima que los estudiantes mexicanos salen con deficiencias importantes de los niveles básicos de educación, lo que representa un desafío tanto a nivel nacional como local en Puebla.
En este contexto, las universidades tienen el reto de preparar mejores estrategias de enseñanza para guiar a los estudiantes hacia un dominio sólido de las matemáticas. Damián Emilio Gibaja subrayó la necesidad de diseñar estrategias educativas que fomenten el pensamiento crítico y la resolución de problemas, no solo proporcionando soluciones, sino también desarrollando la capacidad de comprender el proceso detrás de ellas.
Asimismo, destacó la importancia de romper con el paradigma de que las matemáticas son abstractas y no se aplican a la vida cotidiana. Por el contrario, afirmó que las matemáticas están presentes en todas partes y son fundamentales para la toma de decisiones, especialmente en contextos colectivos. Al entender cómo las matemáticas pueden mejorar la comprensión de problemas complejos y diseñar soluciones efectivas, se pueden establecer estrategias para alcanzar el bien común en la sociedad.
En cuanto a la pedagogía matemática, Gibaja Romero hizo hincapié en la diferencia entre el entrenamiento y la educación matemática. Mientras que el entrenamiento puede generar conocimiento a corto plazo, la educación busca adquirir conocimiento a largo plazo y desarrollar habilidades duraderas. Es fundamental que los profesores comprendan esta distinción y se enfoquen en educar a los estudiantes para que valoren y apliquen las matemáticas en diversos contextos.