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Por: Luis Escobar Ramos / www.muraleducativo.com
Para cerrar este tema relativo a los nuevos entornos laborales y los conflictos que se están generando en los Estados Unidos por ese motivo, y que tienen como una de sus coincidencias y características la utilización de las Inteligencias Artificiales en sus distintas vertientes.
Así como, la gestión algorítmica de sistemas que están controlando paulatinamente los procesos de trabajo; lo que ha puesto en estado de alerta a los trabajadores sobre una potencial pérdida de sus puestos de trabajo; en esta entrega abordaremos la huelga de los trabajadores de la industria automotriz.
Desde principios del pasado mes de septiembre se puso en los medios de comunicación la posibilidad de una huelga en las 3 grandes armadoras de Detroit; ya que el sindicato United Auto Workers (UAW) exige un aumento salarial del 46%, semana de 32 horas con pago de 40, la restauración de las pensiones tradicionales, menor uso de eventuales, entre otras demandas.
Peticiones que desde mi punto de vista han desdeñado Ford, General Motors y Stellantis (antes Chrysler), confiados en los grandes avances logrados desde la crisis inmobiliaria de 2008, periodo en el que en la búsqueda de conservar la viabilidad de sus empresas, los trabajadores aceptaron la disminución de derechos adquiridos plasmados en sus pactos colectivos.
De igual forma, durante la pandemia el sindicato y los trabajadores realizaron esfuerzos tanto laborales como contractuales para dar viabilidad a las empresas en esa difícil etapa; sin embargo, transcurrido el tiempo estas automotrices no sólo han mantenido su viabilidad, sino que han quintuplicado sus ganancias, las que por supuesto no han compartido de manera equitativa y justa con sus trabajadores.
Esto, bajo el argumento de que están realizando fuertes inversiones para enfrentar la transición energética y de que competidores como Tesla y otros fabricantes extranjeros no tienen sindicatos, por lo que su mano de obra es mucho más barata; lo que ha generado las inconformidades del sindicato y de sus empleados; que han manifestado: “Ganancias récord significan contratos récord” este es desde mi punto de vista uno de los motivos principales de la huelga.
El sindicato UAW estalló la huelga el pasado 15 de septiembre en las 3 grandes automotrices
Ante la falta de acuerdos y en una acción que está siendo destacada como el despertar sindical estadounidense, el sindicato UAW estalló la huelga el pasado 15 de septiembre en las 3 grandes automotrices, hecho inédito en la historia de ese país, que inicia una nueva etapa de lucha sindical.
Y que como ya hemos apuntado, es el reflejo de la disparidad, debido a que las empresas registraron un 65% de aumento de ganancias en 4 años, mientras a los trabajadores sólo otorgaron un 6% de aumento en el mismo lapso. Así mismo, este movimiento es trascendente porque después de 40 años de neoliberalismo puro, hoy se ha desatado una vorágine de trabajo sindical.
De igual forma es necesario enfatizar que, en un fenómeno poco usual, 7 de cada 10 norteamericanos aprueban hoy a las organizaciones sindicales y para el caso particular de la industria automotriz, 3 de cada 4 han tomado partido por los trabajadores de UAW.
La huelga inició con el involucramiento de 12,700 trabajadores de las 3 empresas, sin embargo, en abono al conflicto netamente laboral se ha llevado éste al terreno político, ya que los tiempos son propicios ante la cercanía de la definición de candidatos a la presidencia del país; de tal manera que este movimiento podría no sólo definir el futuro de la transición energética, sino incidir en el resultado de las elecciones del próximo año y el propio futuro del Partido Demócrata.
La participación de las nuevas tecnologías y las Inteligencias Artificiales en el ramo automotriz
Las automotrices han venido aumentando sus propuestas económicas que iniciaron con un 14,5%, llevándolas en la primera semana de huelga al 21%, aunque no en la misma medida cada una de ellas; lo que no satisface las pretensiones del sindicato y exigen el mismo 40% de aumento salarial otorgado a los directivos.
Un aspecto que premeditadamente quiero abordar por separado, por su alta importancia es el referente a la participación de las nuevas tecnologías y las Inteligencias Artificiales en el ramo automotriz, que es uno en los que en mayor medida se está viendo su aplicación y que por lo tanto, el sindicato UAW tiene muy claros los tiempos y coyunturas políticas para lograr sus objetivos en lo que refiere a las definiciones de los aspectos laborales en la transición a la electromovilidad, la adhesión de trabajadores que ya laboran en ensambladoras de autos eléctricos y baterías al sindicato y la inclusión de éste en el diseño e implementación del proceso de trabajo de vehículos eléctricos, que contempla el uso de inteligencias artificiales, y del que Ford ha dicho que representará una disminución de 40% de personal, por lo que es vital para los trabajadores entablar una negociación al respecto.
Conforme han pasado las semanas y ante la ausencia de un acuerdo entre las partes, UAW ha decidido ampliar la huelga en varias plantas y centros de distribución de autopartes para reparación de vehículos y con ello ha aumentado tanto la tensión al decidir Stellantis y General Motors el despido de trabajadores, como el número de trabajadores involucrados directamente en el conflicto.
Aspecto para destacar es la visita que el Presidente Biden hizo a los trabajadores de UAW para manifestarle su apoyo y solidaridad con su movimiento. Lo que no sucede cotidianamente y puede cargar los dados hacia los trabajadores; así como el desaire del líder del sindicato a Donald Trump a una reunión recientemente.
Es así que entre la postura de las “TRES GRANDES” de no ceder mayores porcentajes salariales, el rechazo de UAW a las propuestas y la estrategia sindical de ir ampliando paulatinamente la huelga a mayor número de plantas, continúa desarrollándose este conflicto del ramo automotriz, que para EEUU y el futuro de los trabajadores puede marcar la pauta en varios ámbitos, incluida por supuesto la transición energética.
Finalmente y a manera de conclusión personal, debo decirles que en el centro de todos estos hechos se ubica la presencia del modelo neoliberal, que en su lógica de mayor poder al mercado y menos al estado, le ha restado facultades a este último de rectoría de la vida económica, privilegiando la autorregulación de las empresas, cuando debiera ser un esfuerzo conjunto entre éste, empresas y trabajadores, en este caso del cambio climático y la transición energética, a través de un nuevo contrato social que contemple la alineación de la acción climática, el crecimiento económico y los derechos de los trabajadores; en resumen, cierro esta entrega con un frase de la organización no gubernamental “Project Syndicate” que dice: Mientras se consideren la creación de empleos de calidad y los derechos de los trabajadores agregados opcionales en la lucha contra el cambio climático y el progreso económico y social, la batalla estará perdida, al tiempo……..
Luis Escobar Ramos
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