Las Emblemáticas Pensiones Francesas
Por: Luis Escobar Ramos / www.muraleducativo.com
Para concluir con este tema que es vital en el corto, mediano y largo plazo para todos los países, ya que, si bien es cierto que el mundo está evolucionando tecnológicamente hablando, también lo es que, en el contexto de Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA), la humanidad sufre los impactos de los cambios que son implementados a través de políticas públicas, programas, leyes y demás regulaciones.
Dicho lo anterior porque el tema pensionario que hoy tratamos forma parte de esas decisiones que impactan a los trabajadores y a la sociedad.
El pasado mes de abril transcurrió en Francia entre las pretendidas visitas de Macron a diversas localidades, con un discurso ambiguo y falto de franqueza, en el que por un lado decía buscar un acercamiento y reconciliación con la sociedad, mismo que fracasó, por otro lado, dando por superada y aceptada la reforma pensionaria, para lo cual dio a conocer un plan de 50 medidas.
Cuyo objetivo es evitar la crisis del agua, un tema delicadísimo en el país desde hace algunos años y hacia el futuro; de igual forma, anunciando una reunión con los sindicatos, no obstante, condicionando ésta a su realización bajo la agenda propuesta por él y la primera ministra Elizabeth Borne.
Mientras tanto algunas corrientes del nuevo partido anticapitalista con tendencias trotskistas dicen estar en momentos de trastocar directamente al poder; la izquierda con Mélenchon al frente y la Nueva Unión Popular Ecológica y Social pretenden consensuar y unificar acciones en las calles.
En tanto, la organización de trabajadores INTERSINDICAL, que agrupa a más e 13 centrales sindicales hace llamados a huelgas y movilizaciones, encontrando grandes respuestas a ello, de tal forma que es evidente que para la sociedad francesa el Artículo 49.3 constitucional no es el final, sino el principio de la lucha social.
Siguiendo con su ruta trazada, el Presidente Macron promulgó el pasado 15 de abril la impopular reforma de pensiones, publicándola en el Diario Oficial del gobierno, con posterioridad a la aprobación por el Consejo Constitucional, no importándole los llamados de los inconformes que solicitaban al Ejecutivo esperar y con ello atemperar las tracciones, ello agudizó el coraje de los sindicatos y los opositores y alentó el recrudecimiento de las protestas en todos los espacios posibles del país.
Cabe señalar que dicha ley entrará en vigor el 1 de septiembre del presente año, por lo que el conflicto toma mayores dimensiones, con protestas permanentes y la sintonía considero no cambiará.
En la segunda quincena de abril y con la finalidad de superar la crisis, Macron anunció un “nuevo pacto sobre la vida en el trabajo” que trata la mejora de ingresos y de condiciones laborales, incluida una mejor distribución de la riqueza, entre otras cuestiones, acompañando lo anterior de una propuesta de apaciguamiento y de la idea de un nuevo pacto social, lanzando un mensaje de unidad, sin embargo, aún con ello, los sindicatos se niegan a reunirse con él antes del 1 de mayo.
Los temores de los trabajadores franceses, sus organizaciones y de la sociedad no son infundados, ya que recientemente se supo que el gobierno ha contratado a varias empresas de gestión de activos, entre las que destaca Black Rock, como asesoras en la creación del nuevo Fondo de Pensiones; así como su gestión y conociendo los antecedentes sobre ello, todo apunta a los esquemas de capitalización individual que han impulsado e impuesto en muchos países con resultados catastróficos.
En la emblemática fecha el 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo, los sindicatos, partidos políticos y organizaciones no gubernamentales, entre otras, cumplieron su promesa saliendo a las calles cerca de 3 millones de personas encolerizadas contra el gobierno francés y su política neoliberal, constituyéndose en una conmemoración histórica en el país, ya que no existen antecedentes de una protesta de tal talante.
Es fundamental anotar que este conflicto social aún tiene mucha cuerda para los franceses y en los siguientes meses tendremos noticias de como se desarrollan los acontecimientos, no obstante, debo decirles que decidí abordar este asunto, ya que lo considero trascendental en el presente y futuro de los trabajadores, partiendo del panorama de agotamiento del modelo económico actual, lo que lleva a los organismos internacionales y a los gobiernos de los países a escudriñar de donde obtener los recursos, con el objetivo de mantener su prevalencia.
Para cerrar el tema me permitiré hacer algunas conclusiones que considero pertinentes, mismas que son las siguientes:
Esta reforma y conflicto no es sólo de los trabajadores, sino un problema de carácter social, tal y como lo ve y ubica la sociedad francesa, por lo que así debe ser percibido y tratado por las sociedades de todos los países.
Como parte de las reflexiones, debemos estar muy al pendiente, ya que los acontecimientos recientes de quiebras de bancos tanto en EE UU. como en Europa, al estar ligado dicho sector en el entorno neoliberal a los esquemas pensionarios individualizados y que los consideran como parte del “Sistema de Ahorro del Mundo”, esto puede ser utilizado como el pretexto perfecto para continuar con la disminución de derechos de carácter pensionario a través de reformas retrógradas.
Los riesgos de crisis del capitalismo mundial (agotamiento del modelo Neoliberal) ´pone en un serio riesgo los recursos de los trabajadores y en consecuencia el estado de bienestar de la sociedad mundial.
La previsión social, tal y como su nombre lo indica, da la oportunidad y factibilidad a los gobiernos y empresas de planear, construir e implementar esquemas pensionarios viables en el corto, mediano y largo plazo; por lo que los trabajadores no son los responsables de factores actuariales (expectativa de vida); así como de la modificación y evolución del mercado laboral, sin embargo, nunca han mostrado una actitud de cerrazón a dialogar este tema, que es sustancialmente diferente a aceptar imposiciones arbitrarias de gobiernos y empresas.
Dentro de este entramado derivado del conflicto y crisis provocado por la reforma en materia pensionaria, la sociedad y sectores franceses deberán estar atentos y observar los siguientes aspectos:
1) El sector sindical francés deberá ser muy cuidadoso en que el movimiento logre los objetivos planteados, pero a la par evitar que se ´politice y desvirtúe, como suele suceder.
2) La sociedad francesa debe mantener la esencia del movimiento, es decir, no permitir en ninguna circunstancia que se desvíe y degrade y que tanto la derecha y ultraderecha; así como las izquierdas partidistas absorban el mismo para conseguir sus objetivos particulares, ya que es notoria dicha intención, de cara a las elecciones del año 2027, sobre todo de parte de Marine Le Pen; cuyo distintivo ultraderechista no es para nada la protesta social.
Finalmente, en el plano general, debo decirles que, una pensión derivada de una relación de trabajo, sustentada en determinado número de años y de servicio, pactada entre las partes involucradas debe respetarse, debido a que constituye derechos humanos y sociales reconocidos en las legislaciones, ya sea locales nacionales o supranacionales.
Luis Escobar Ramos
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